LA ASOCIACION PARA LA RECUPERACIÓN DE LA MEMORIA HISTÓRICA DE EXTREMADURA (ARMHEX), se complace en comunicar la Presentación del libro, de nuestro socio y amigo, el historiador Angel Olmedo Alonso:
“Llerena 1936. Fuentes orales para la recuperación de la Memoria Histórica”.
Historiador y miembro de la ARMHEX
Libro Premio “Arturo Barea” de investigación histórica. 2009.
MARTES, 25 de ENERO 2011, a las 20h.
Lugar: Patio de Columnas de Diputación Provincial
Calle Obispo San Juan de Ribera, 6. Badajoz.
Organiza:
ASOCIACION PARA LA RECUPERACIÓN DE LA MEMORIA HISTÓRICA DE EXTREMADURA (ARMHEX)
Colabora:
DIPUTACION PROVINCIAL DE BADAJOZ
El libro de investigación 'Llerena 1936. Fuentes orales para la recuperación de la memoria histórica', de Ángel Olmedo Alonso, relata, a través de documentación histórica y testimonios orales, la represión desatada en esta localidad por las nuevas autoridades franquistas, durante el año que comenzó la Guerra Civil española.
Este libro, fue premiado con “Premio Arturo Barea” de investigación histórica, en su IX edición, convocado por la Diputación Provincial de Badajoz, y editora a su vez de la publicación.
En el libro se hace un recorrido sobre la II República en Llerena, los conflictos sociales de la época, la guerra y la represión, tanto durante la guerra civil como en la postguerra. A través del estudio y recogida de testimonios orales (más de 40), junto con el trabajo en archivos, registros civiles, prensa y otra documentación, nos han permitido la reconstrucción de aquel periodo histórico. Las cifras son elocuentes, un mínimo de 440 fallecidos (de ellos 60 milicianos que fueron fusilados antes de entrar las tropas de Castejón en Llerena, y cuyos nombres aún no conocemos por no estar inscritas sus defunciones en los registros). En el libro se recoge un listado con los nombres de 330 personas fusiladas y unas 75 que pasaron por prisión, además de 32 combatientes franquistas que murieron en el Hospital Militar de Llerena a consecuencia de las heridas en los frentes de guerra. Junto a la investigación histórica va el relato de las personas que vivieron aquellos acontecimientos y de familiares que los sufrieron. Esta metodología nos ha servido para conocer cómo se articulaba el proceso represivo en las localidades que iban siendo ocupadas por los rebeldes y cómo perduró el control social durante décadas.
Este trabajo se inició a raíz de la recuperación de 38 cuerpos en dos fosas comunes del Arroyo Romanzal de Llerena en el verano del año 2005 y se ha prolongado hasta ahora con la edición del mismo. El objetivo del estudio es saber qué pasó, por qué y dar la voz a las víctimas, como reconocimiento social para con ellas, además de dar a conocer estos hechos a la parte de la sociedad que vivió ajena a aquellas atrocidades.
El estudio superar el marco local por cuanto los hechos no son aislados ni exclusivos de aquella localidad, pues afectaron a personas de la comarca de Llerena, de Sierra de Tentudía y de pueblos de Sevilla y Huelva, desplazados a consecuencia de la guerra en su intento por llegar a zona republicana (Castuera) a través de las líneas franquistas en Extremadura.
Con el estudio se comprueba cómo existía una cadena de mando perfectamente organizada que recibía y daba órdenes, con un plan para neutralizar a las personas que hubieran tenido algún tipo de cargo representativo durante la II República, como fue el caso de la corporación municipal de Llerena, cuyos miembros pasaron por Consejo de Guerra, con largas condenas en prisión y en el caso de Isidro Esmeralda, condenado a pena de muerte y fusilado.
El libro cuenta con un prólogo del historiador extremeño Francisco Espinosa (autor del libro La columna de la muerte. El avance del ejército franquista de Sevilla a Badajoz, Barcelona, Crítica, 2003). Señala Espinosa “La aportación de Ángel Olmedo es la reconstrucción del proceso represivo. Ya sabemos que los documentos que nos legó la dictadura son parcos en información sobre este asunto. Fue mucha la energía derrochada para ocultar la matanza fundacional. La novedad es el recurso a la fuente oral, ya utilizada en otros trabajos anteriores pero de especial relevancia en este caso y por lo que a Badajoz se refiere. Se trata de la memoria de la gente que sufrió en su propia carne o en su ámbito más cercano los zarpazos de la represión. Y no está mal que esto se haga en un contexto en que desde diferentes ámbitos se pone en duda la memoria frente a la historia y se critica el concepto extendido hace ya tiempo de memoria histórica”.
Ángel Olmedo Alonso nació en la localidad cacereña de Navaconcejo en 1965 y reside en Mérida desde hace muchos años, donde trabaja y desarrolla su labor investigadora. Es licenciado en filosofía y letras, sección de historia contemporánea por la UEX. Ha publicado diversos libros sobre el anarquismo y la memoria histórica, así como artículos sobre la guerra civil, la represión y los lugares de la memoria en Extremadura. Desde el año 2003 ha sido Director de los Campos de Trabajo para Recuperación de Memoria Histórica que se llevan a cabo, a propuesta de la ARMHEX (ASOCIACION PARA LA RECUPERACIÓN DE LA MEMORIA HISTÓRICA DE EXTREMADURA, asociación a la que pertenece desde sus inicios) con la subvención del Instituto de la Juventud de Extremadura. Ha colaborado igualmente en diversos programas de televisión y en varias series de documentales sobre la guerra civil en Extremadura.