viernes, 30 de agosto de 2013

30 DE AGOSTO. En el Día Internacional de los Desaparecidos

Amado Viera Amores, Alcalde de Valencia de Alcántara (Cáceres), asesinado el 25-09-1936.
77 años desparecido




30 DE AGOSTO. En el Día Internacional de los Desaparecidos, la ASOCIACION PARA LA RECUPERACION DE LA MEMORIA HISTORICA DE EXTREMADURA, un año más, quiere sumar su voz a la de los familiares de las personas desaparecidas, especialmente a las extremeñas, y pedir al Gobierno del Estado español, que impulse una investigación oficial sobre todo los casos de desaparición forzada de aquel periodo, pues la desaparición forzada es una de las más graves violaciones de derechos humanos.

Más de 114.000 familias españolas, entre ellas muchas familias extremeñas, siguen sin saber donde están sus seres queridos, desaparecidos a consecuencia de la represión del los golpistas que provocaron la guerra civil y el franquismo.

Todas las acciones y omisiones que fueron cometidas, ordenadas, planificadas o instigadas desde 1936 por el movimiento golpista de sublevación militar anticonstitucional, pasaron a convertirse en hechos ilícitos de España en virtud de los principios de continuidad de la personalidad del Estado y de continuidad entre el movimiento insurrecto y el nuevo gobierno violentamente instaurado.

Las víctimas tienen derecho a la verdad, la justicia y la reparación, porque en realidad son víctimas de crímenes internacionales cometidos durante la Guerra Civil por los golpistas y la posterior represión franquista. Reconocer esos derechos debe suponer cumplir con obligaciones internacionales que España no puede obviar por más tiempo.

Las autoridades españolas no pueden seguir desoyendo a su sociedad civil, a las asociaciones de víctimas y a los órganos internacionales de derechos humanos. Su actitud compromete seriamente la responsabilidad internacional de España, porque es jurídicamente contraria al Derecho internacional. Además, es políticamente inaceptable y moralmente censurable, porque es la causa directa del sufrimiento permanente de los miles de familiares de las víctimas de crímenes internacionales que, durante largos años, reivindican con justicia su derecho a un recurso efectivo que satisfaga su derecho a la verdad, a la justicia y a la reparación.

Además, como se ha demostrado, España tiene la obligación internacional de investigar los casos de desaparición forzada de personas durante la Guerra Civil y posterior represión franquista pendientes de esclarecimiento. Las víctimas y sus familiares tienen derecho a la tutela judicial efectiva, lo que significa que el Estado debe facilitar la investigación judicial de los casos pendientes, y auxiliar, con todos los medios a su alcance, a los familiares que deseen localizar, identificar y exhumar los restos de los desaparecidos.

En general, la legislación ordinaria debe ser concordante tanto con la Declaración de las Naciones Unidas contra la desaparición de personas, como con lo establecido en la Convención Internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas, que también consagra la dimensión colectiva del derecho a la verdad, así como la obligación continuada del Estado de buscar e investigar los casos de personas desaparecidas, hasta que se halle su paradero.

Recordemos que el 20 de diciembre de 2006 la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas y que todos los Gobiernos deben desde entonces, conmemorar este Día Internacional de los Desaparecidos.

Hoy, Día Internacional de los Desaparecidos, desde la ARMHEX pedimos al gobierno del estado español que asuma un compromiso categórico con los derechos humanos en cuanto a las desapariciones forzadas del franquismo se refiere. Las autoridades españolas deben facilitar el acceso a la verdad, la justicia y la reparación de las víctimas de desaparición forzada durante la Guerra Civil y el Franquismo. Decenas de miles de personas fueron víctimas de desaparición forzada por parte de los golpistas tanto durante la Guerra Civil como durante la dictadura franquista, tras finalizar la guerra. Según los últimos estudios, son más de 114.000 personas y así se ha denunciado ante los tribunales españoles. Pero el Gobierno del Estado español, ahora bajo la presidencia del Sr. Rajoy, sigue obviando o al menos orillando, la responsabilidad del Estado de investigar estas graves violaciones de derechos humanos y garantizar justicia y reparación a todas las víctimas del franquismo, limitandose a hacer pública una breve declaración retórica el pasado viernes, sin la menor alusión a las victimas y desaparecidos a causa del franquismo, cuyos familares aún los buscan por fosas y cunetas. España tiene el deber de poner fin a la prolongada injusticia de la que han sido objeto las víctimas de desaparición forzada y sus familiares, llevando a cabo las investigaciones necesarias para dar a conocer el paradero de los restos de estas personas, y esclarecer las circunstancias en que tan graves abusos se produjeron. Las autoridades españolas tienen el deber ético y jurídico de cumplir sus compromisos con la legalidad internacional. En junio de 2010, se modificó el Código Penal con un injustificable “olvido”: no se ha incorporó expresamente el delito de desaparición forzada, conforme a la definición de la Convención de Naciones Unidas para la Protección de las Personas ante la Desaparición Forzada, que España ya ha ratificado. Igualmente, el Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas de Naciones Unidas lleva años solicitando al Gobierno español información sobre cuatro casos de desapariciones forzadas durante la Guerra Civil y el franquismo, sin que el Ejecutivo haya facilitado ningún tipo de información al respecto todavía. El citado Grupo de la ONU, en mayo de 2010 enfatizó sobre el derecho de las víctimas a la verdad. Durante el Examen Periódico Universal de España en Naciones Unidas celebrado el año pasado, el Gobierno se comprometía a examinar la recomendación de investigar, castigar y reparar los crímenes de desaparición forzada, independientemente del momento de su comisión, dada la naturaleza continuada del delito y de conformidad con sus obligaciones internacionales. Seguimos a la espera.

Uno de los muchos casos de extremeños desaparecidos, es el caso de AMADO VIERA AMORES (en la foto), Abogado, Alcalde republicano, de Valencia de Alcántara (Cáceres) en 1936. Nació en Ceclavín (Cáceres), el 11 de octubre de 1902. Estudió Derecho en la Universidad de Salamanca y ejerció la abogacía en la provincia de Cáceres, viviendo en Valencia de Alcántara, en dónde se casó y tuvo dos hijos, una de ellas es CONCHITA VIERA, miembro de nuestra asociación e infatigable luchadora por dignificar la memoria de su padre, así como del resto de las víctimas del franquismo.

Amado Viera Amores, fue un hombre estudioso y reflexivo, desde muy pronto sintió gran preocupación por los problemas sociales de la época, dejando reflejadas sus ideas en numerosos artículos y escritos en la prensa local y regional de época, especialmente sobre la cuestión agraria, la religión o la educación en España. Ideas de progreso, que le hicieron ingresar en el sindicato socialista “El Redentor” del que fue presidente por dos veces y, asimismo, en las Juventudes Socialistas, al mismo tiempo que colaboró activamente en la construcción de la Casa del Pueblo de la localidad. Bajo las siglas del partido socialista, accedió democráticamente a la alcaldía de Valencia de Alcántara en febrero de 1936, siendo el último alcalde democrático de Valencia de Alcántara, hasta que en la transición democrática, en pleno 1979, se llevaron a efecto elecciones municipales.

Tras el golpe militar en 1936, fue detenido el 25 de septiembre de 1936 (fecha de la que pronto se cumplirán 75 años), en su domicilio por varios falangistas, y requerido para que les acompañase a la Inspección de Policía, a la puerta de la cual le hicieron subir a un coche con rumbo desconocido, siendo público y notorio en el pueblo su asesinato ese mismo día, junto a otros 12 hombres, en la mina de la finca de "Cuadrillas de Arriba" del mismo término municipal de Valencia de Alcántara, en la que arrojaron sus cuerpos, según contrastadas investigaciones historiográficas. Tanto durante los días previos a su “paseo”, como mientras se lo llevaban, llamó a sus conciudadanos a mantener la calma y la convivencia pacífica. No llegó a cumplir los 34 años de edad.

Su cuerpo al igual que el de los otros 11 hombres, se encuentran aún hoy, en pleno 2012, en aquella fosa, sin que haya sido posible su recuperación, por la manifiesta negativa de los propietarios de la finca donde se ubica la misma, a permitir el paso a los técnicos, para las labores de prospección de la fosa, a pesar de que existe ya desde Noviembre de 2011, un proyecto aprobado para el sondeo arqueológico de esa fosa, por el Ministerio de la Presidencia del anterior gobierno, sin que hasta la fecha la Dirección General de patrimonio de la Junta de Extremadura, haya avanzado en el trámite del expediente de ocupación temporal forzosa del terrenos, tay y como se recoge en el art. 14.3º de la Ley 52/2007. Sin tal trámite, el Proyecto citado no puede ejecutarse, después de estar aprobado, por cumplir todos y cada uno de los requisitos legales.

La ASOCIACIÓN PARA LA RECUPERACIÓN DE LA MEMORIA HISTÓRICA DE EXTREMADURA, ha denunciado públicamente en varias ocasiones en los últimos años, que aún existen cientos de personas que fueron asesinadas y permanecen arrojadas desde entonces en cunetas y fincas de titularidad privada nuestra región; y lleva igualmente años luchando por reivindicar la memoria de Amado Viera Amores, así como de otros muchos desaparecidos, pues el caso de Amado es uno de muchos, intentando que los propietarios de las fincas autoricen la realización de las tareas necesarias para localizar y excavar la fosa, con la finalidad de recuperar los restos y que puedan ser enterrados dignamente y una actuación más decidida y tutelar de las administraciones públicas competentes, en especial a la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Extremadura, para con los familiares de estas víctimas.

sábado, 17 de agosto de 2013

GERVASIO PUERTA. IN MEMORIAM.



El incansable luchador antifranquista Gervasio Puerta García (Milagros, 1921), alias "el Rubio", falleció el pasado jueves 15 de agosto a los 92 años de edad. Agotado tras una larga lucha contra el cáncer, su cuerpo dijo basta en la mañana del jueves. En su honor, tal y como él deseó, no habrá ninguna ceremonia, entierro o crematorio, y su cuerpo ya ha sido entregado a la Universidad Complutense de Madrid para su estudio por la ciencia.

"Toda su vida ha sido una oda a la lucha. Nunca ha dejado de luchar por lo que creía. Se enfrentó al franquismo y hasta sus últimos días batalló por una democracia más justa y real. Su muerte nos ha dejado huérfanos a todos los demás", señala a Público Manuel Gambín, compañero y amigo de Gervasio, que actualmente ocupaba el cargo de presidente de honor de la Asociación de ex Presos y Represaliados Políticos Antifranquistas, donde también fue presidente durante más de 20 años.

La vida y la trayectoria de Gervasio están unidas de manera indisoluble a la lucha antifranquista y a la democracia. El poeta Marcos Ana, su amigo, dijo de Puerta que "su vida está jalonada por una riqueza vital en defensa de los valores de la libertad". Luis Pérez, actual presidente de la asociación de ex presos, lo califica de "hombre imprescindible", porque ha trabajado sin cesar "todos los días de su vida".

Con tan sólo 15 años y falseando su edad, Gervasio Puerta se alistó en el ejército republicanopara luchar contra el ejército golpista en defensa de la República. Con apenas 17 años, ya era teniente. "Durante la Guerra Civil, Gervasio perdió a casi toda su familia, incluido su padre, y a sus mejores amigos", recuerda Luis Pérez.

Con el ejército republicano en retirada, Gervasio cruzó la frontera francesa y fue recluido en loscampos de concentración de españoles en Francia de Argelés-sur-mer, Saint Ciprién y Barcarés. La experiencia de la derrota, sin embargo, no calmó sus ganas de luchar. Cuando estalló la II Guerra Mundial, Gervasio se unió al ejército francés para luchar contra las tropas alemanas de Adolf Hitler a la vez que continuó organizando un ejército de españoles que pudiera derrocar la dictadura de Francisco Franco desde los Pirineos.

En mayo de 1943, enrolado en las filas del PCE, Gervasio Puerta regresó de manera clandestina a España para reorganizar la resistencia desde dentro. Sin embargo, fue detenido por la Policía Político y Social de la dictadura y fue encarcelado entre 1946 a 1450, y una vez más en 1961 hasta 1965. Durante su tiempo de recluso pasó por las cárceles de Sevilla, Burgos y Carabanchel.

Su labor en prisión fue imprescindible para el resto de compañeros que le acompañaban. "Conocí a Gervasio en el penal de Burgos. Allí estuvo llevando un trabajo muy comprometido. Se encargaba de recibir información del exterior y trasladarla al resto de compañeros y al contrario, enviaba mensajes al exterior sobre las condiciones del penal a través de hojas de fumar", recuerda Manuel Gambín.

Ya en la precaria democracia, Gervasio participó con la Asociación de ex Presos y Represaliados Políticos Antifranquistas, de la que fue presidente durante 20 años y ocupó la presidencia de honor hasta su muerte. También colaboró en la formación de la Asociación de las Brigadas Internacionales en 1990 y posteriormente, en 1995, de la AABI, de la que fue vice-presidente.

En 2011, Gervasio dejó constancia de su vida en una autobiografía titulada Palomas tras las rejas, donde narró sus vivencias personales como activista, miliciano, encarcelado, represaliado y exiliado, así como de episodios clave de la historia de España como la Ley de Amnistía del 77 o la evolución de la precaria democracia.

Durante sus últimos años de vida su batalla se centró en el reconocimiento público de la memoria de todos aquellos y aquellas que fueron encarcelados por sus ideas políticas durante el franquismo. Se mostró partidario de buscar a los"asesinos fascistas" que aún siguen vivos y de restaurar la memoria de todos aquellos republicanos que, a día de hoy, siguen enterrados bajo cualquier cuneta del Estado español.


La ARMHEx, lamenta profundamente el fallecimiento de este gran luchador, sobre todo porque poco a poco por cuestiones biológicas, van desapareciendo estos protagonistas de nuestra historia silenciada durante tanto tiempo, sin un completo homenaje, de toda la sociedad española e institucional del Estado. Lamentamos tan irreparable pérdida de otro protagonista más de la lucha antifranquista, y públicamente la ARMHEX, trasmite sus condolencias a su familia y amigos.

sábado, 10 de agosto de 2013

BADAJOZ. 14 DE AGOSTO. CONTRA EL OLVIDO




El jueves 14 de agosto, se cumplen 77 años del inicio de la matanza de Badajoz por la Columna de la Muerte, al mando del teniente coronel Yagúe, de infausta memoria. 77 años del día más nefasto de la reciente historia de Badajoz, a partir del cual comenzó un período de violencia criminal que se llevó por delante a miles de personas, y que marcó para siempre la vida de esta ciudad.


La masacre que se desarrolló en la ciudad de Badajoz, a partir del 14 de agosto de 1936, fue una de las primeras evidencias ante el mundo, de la política de exterminio del adversario, programado por los militares golpistas.

Es posible que Badajoz sea la ciudad española en que, en relación con su población, un mayor número de personas fueran asesinadas a consecuencia del golpe militar y de la masacre realizada tras su ocupación en agosto de 1936.

El cementerio de San Juan, y otros lugares de la ciudad, pertenecen a la historia silenciada y oculta de Badajoz. Allí fueron asesinadas muchas personas que pasaron luego a fosas comunes, muchos incinerados, abiertas en el interior de dicho cementerio, hechos de los que existe documentación gráfica, como son las imágenes captadas por el cámara periodista francés René Brut que dieron la vuelta al mundo. No hay Memoria sin lugares, ni lugares sin Memoria.

Uno de los estudios más exhaustivos y documentados sobre la matanza es el realizado por el historiador Francisco Espinosa, quien, en su libro "La columna de la muerte" (Editorial Crítica, 2003), documenta unos 1.400 asesinatos registrados en los libros del cementerio y del Registro Civil, pero constata que las personas asesinadas podrían ser más de 3.800, pues muchos nunca fueron registrados.

Como dice el citado historiador sobre la represión franquista: "Dos fueron los instrumentos de los que se sirvieron los golpistas para llevar a cabo el plan represivo: los bandos de guerra y los consejos de guerra sumarísimos de urgencia. Es sobradamente conocido el bando publicado por la Junta Militar el 28 de julio de 1936; sin embargo son totalmente desconocidos aquellos con los que se funcionó realmente a nivel local desde el primer momento. En la práctica los bandos de guerra pretendieron dar un barniz seudolegal a la gran matanza del 36. Luego miles de personas serían inscritas en los registros civiles con la causa de muerte: "Aplicación del Bando de Guerra". No obstante, lo que interesa destacar de esta etapa fue el altísimo número de personas que quedaron sin inscribir en el registro Personas de cuya muerte no ha quedado huella alguna: detenidas ilegalmente, asesinadas y enterradas por lo general en fosas anónimas abiertas en los cementerios, en el campo e incluso en fincas particulares. El mapa de las fosas comunes se superpone a la España donde triunfó el golpe militar y se aplicó de inmediato el calculado plan de exterminio que los sublevados tenían previsto desde el principio".


"Respecto a la represión franquista cabe establecer tres etapas. La primera, la de la represión salvaje con los bandos de guerra, comprende desde el 17 de julio del 36 a febrero de 1937. La segunda, la de los consejos de guerra sumarísimos de urgencia, va de marzo de 1937 a los primeros meses de 1945. Podría parecer que el final de la guerra marca una separación pero realmente es lo mismo; quizás la disminución del ritmo represivo iniciado en el 36 se perciba a partir de 1943. Y la tercera sería la gran oleada represiva de fines de los cuarenta y de los años cincuenta, marcada por la eliminación de docenas de guerrilleros y de cientos de personas acusadas de servirles de apoyo".










Reseñas:



En la Portada del Diário de Lisboa del sábado 15 de agosto de 1936, el titular decía: "Badajoz ha sido entregada a los legionarios y regulares marroquíes.". "Escenas de horror y desolación en la ciudad conquistada por los rebeldes." La crónica la firma Mário Neves e incluye la entrevista con Juan Yagüe, donde le informa y no le desmiente que ya hubiera unos 2.000 fusilados.


Durante toda la jornada, se produjeron asesinatos por las calles de la ciudad, sobre todo a cargo de legionarios marroquiés. El mismo día 14, Yagüe ordenó el confinamiento de todos los prisioneros -la mayoría civiles- en la plaza de toros.


Según artículos publicados por los corresponsales de Le Populaire, Le Temps, Le Figaro, Paris-Soir, Diário de Lisboa y Chicago Tribune se produjeron ejecuciones en masa en varios lugares de la ciudad, y las calles aparecían sembradas de cadáveres.


El 15 de agosto, el enviado de Le Temps, Jacques Berthet, enviaba su crónica:


"alrededor de mil doscientas personas han sido fusiladas (…) Hemos visto las aceras de la Comandancia Militar empapadas de sangre (…) Los arrestos y las ejecuciones en masa continúan en la Plaza de Toros. Las calles de la ciudad están acribilladas de balas, cubiertas de vidrios, de tejas y de cadáveres abandonados. Sólo en la calle de San Juan hay trescientos cuerpos (…)".


El 18 de agosto, Le Populaire publicaba:


«Elvas, 17 de agosto. Durante toda la tarde de ayer y toda la mañana de hoy continúan las ejecuciones en masa en Badajoz. Se estima que el número de personas ejecutadas sobrepasa ya los mil quinientos. Entre las víctimas excepcionales figuran varios oficiales que defendieron la ciudad contra la entrada de los rebeldes: el coronel Cantero, el comandante Alonso, el capitán Almendro, el teniente Vega y un cierto número de suboficiales y soldados. Al mismo tiempo, y por decenas, han sido fusilados los civiles cerca de las arenas».


El martes 18 de agosto, el Premio Nobel de Literatura francés François Mauriac, publicó en primera plana de Le Figaro un artículo sobre los sucesos de Badajoz que conmocionó a Europa. El 30 de agosto apareció en el Chicago Tribune el famoso artículo de Jay Allen (ver recuadro inferior), en el que narró con gran crudeza los terribles sucesos de la ciudad.


El periodista portugués Mário Neves fue uno de los testigos de primera mano de los sucesos de Badajoz, en las crónicas que remitió al Diário de Lisboa, algunas de las cuales fueron censuradas por el gobierno de António de Oliveira Salazar, claramente favorable al bando franquista. Neves regresó a Lisboa horrorizado por el espectáculo del que había sido testigo, y se juró no volver jamás a Badajoz, pero lo hizo en 1982, para recorrer los lugares donde presenció estos hechos en un documental para televisión, fragmento del cual puede verse en esta entrada.



Dentro de programado plan de exterminio del adversario politico, los golpistas que tomaron la ciudad, asesinaron a tres de los alcaldes que la ciudad había tenido. Salvo Sinforiano Madroñero, que tiene dedicada una calle, los otros dos, permanecen en el casi olvido más absoluto tanto institucional como de una parte de la ciudadanía pacense de hoy. Es curioso como actualmente en Badajoz, hay varias calles dedicadas a alcaldes y a presidentes de la Diputación, que lo fueron ilegítamente durante la dictadura franquista sin ser elegidos, y sin embargo ningún recuerdo, ni honor ha dedicado la Corporación municipal de Badajoz, para entre otros, a Eladio López Alegría, primer alcalde republicano y primero en la historia de la ciudad, elegido a raíz de unas elecciones democráticas y a Juan Antonio Rodríguez Machín. Vaya aquí un recuerdo y algunos datos de estos tres alcaldes de Badajoz injustamente asesinados por la barbarie fascista, en aquel verano de 1936: 


F. Eladio López Alegría. Republicano. Concejal hasta el 14 de Agosto de 1936. Abogado, Fiscal y Corredor de Comercio, Secretario de la Cámara Urbana. Primer alcalde de la II República. Presidente de los Jurados Mixtos Agrarios. Presidente comisión para la reforma agraria en Badajoz. Fue asesinado el 16 de Septiembre de 1936, en las tapias del cementario.


Juan Antonio Rodríguez Machín. Republicano. (Acción Republicana). Tercer alcalde tras Rodrigo Almada. Concejal hasta el 14 de Agosto de 1936. Fue asesinado el 20 de Agosto de 1936. Natural de Orellana la Vieja. Vecino de Badajoz. 53 años. Soltero.

Sinforiano Madroñero Madroñero. Socialista. Alcalde en dos etapas. Era el alcalde de la ciudad el 14 Agosto de 1936. Natural de Santi-Spiritu. Vecino de Badajoz. 34 años. Soltero. Fue asesinado el 20 de Agosto de 1936, tras ser devuelto por las autoridades portuguesas tras su marcha al país vecino, donde sin respetar el Derecho internacional humanitario y de asilo, fue entregado sin procedimiento alguno y sin garantías jurídicas de clase alguna, por la policía política salazarista a elementos golpistas franquistas de Badajoz.



IN MEMORIAM. Para todos los asesinados y desaparecidos en Badajoz, en aquellos tristes días que sucedieron a aquel nefasto 14 de agosto. Verdad, justicia y reparación.